Si has leído algunas de mis novelas, quizás te preguntes cómo es el proceso de escritura y edición que hay detrás de cada libro que publico. Tanto si tienes inquietud por escribir como si simplemente te pica la curiosidad, voy a detallarte cómo ha sido, paso a paso, la experiencia de escribir, editar y publicar Rompiendo las reglas 2, la segunda entrega de esta saga donde convergen la nueva generación y la cuadrilla de la muerte de Las reglas del juego.
Lo primero: encargar la portada
Es algo que a veces sorprende cuando se lo comento a otras compañeras y compañeros escritores, pero desde hace tiempo tengo por costumbre encargar la cubierta del siguiente libro que voy a escribir con antelación al momento de publicación. De hecho, por lo general encargo las cubiertas antes de empezar a escribir la novela.
En el caso de Rompiendo las reglas 2 creo que batí mi récord personal, pues me puse en contacto con Lucía Arca, quien se ha encargado de todas las portadas de la saga Las reglas del juego, en noviembre de 2023, cuando tenía planificado empezar a escribir el libro en enero del año siguiente (es decir, unos dos meses después) para publicarla en primavera de 2024.
Trabajar con Lucía es un placer porque es rápida, efectiva, absorbe la idea principal que le planteo y siempre me hace sugerencias que, salvo contadísimas excepciones, acepto con emoción porque mejoran el concepto incial.
Para esta segunda entrega de la trilogía Rompiendo las reglas, nueva saga de libros con protagonistas LGBT en el que trato, entre otros, las problemáticas a las que se enfrentan los deportistas LGBT en el desarrollo de sus carreras, tenía claro la idea principal: quería que se viera a dos chicos tomados de la mano en medio de un estadio de fútbol.
Estos chicos son Andrei y Xabi, pues ambos tienen un gran peso en el argumento del libro. Lucía me hizo una proposición inicial que me gustó muchísimo, pero sentía que le faltaba algo. Fue cuando surgió la idea de ponerles a ambos las pulseras con la bandera LGBT en las manos, un elemento que, a raíz de esta decisión visual para la portada, decidí incluir en la historia (de hecho, estas pulseras son muy importantes en la trama).
No es la primera vez que un componente visual que me propone el portadista, algo que no tenía previsto para la historia, acaba formando parte de la novela. Por ejemplo, cuando Taku me presentó el boceto final de la cubierta de Dos citas en el Tívoli, le puso barba tanto a Gus como a Rob. Le pedí que se la quitara a Gus, pero que se la dejase a Rob. En la trama, que Rob se la deje crecer tiene un significado profundo a nivel de la evolución del personaje.
Ventajas y desventajas de escribir una saga
Las reglas del juego es una saga de novelas LGBT en la que he estado trabajando durante más de diez años. Se compone de una trilogía, una antología de relatos y un spin-off. El llevar tanto tiempo desarrollando la historia de estos personajes es un arma de doble filo, porque si bien conoces al dedillo la psicología y trasfondo de cada uno, el miedo a que se acaben desdibujando me acompaña.
Para combatir este miedo, lo primero que hice antes de empezar a trabajar en el libro 1 de Rompiendo las reglas fue leerme entera la saga ya publicada (aproveché, de paso, para pulirla de erratas e incongruencias; la edición resultante es la 10 aniversario). Así pude reconectar con los personajes, con la historia principal y situarme de cara a este nuevo proyecto. Por lo tanto, ponerme en situación para Rompiendo las reglas 2 fue relativamente sencillo por haber hecho ese trabajo de reinmersión previo.
Luego, una vez hecha esta reconexión, me dejé llevar por el instinto para delimitar los nuevos conflictos de los personajes veteranos. Aquí han tenido un papel fundamental las lectoras cero, que son las que me han dado su opinión sobre si resultaban congruentes o no, y las que me han dado una serie de ideas que han contribuido a que la historia se enriquezca y evolucione.
Creación de las fichas de personaje
Es una de las partes más tediosas del proceso de escribir una novela, pero al mismo tiempo resulta fundamental: redactar unas fichas de personajes para novelas lo más completas posible, en donde se haga hincapié en los eventos que han marcado en el pasado la vida de cada personaje, sus ambiciones, deseos y temores, qué es lo que quieren conseguir y qué obstáculos se van a encontrar a lo largo del camino.
Para Rompiendo las reglas 2 escribí una ficha detallada para los cuatro personajes de la nueva generación (Marina, Niko, Andrei y Xabi), una más bien centrada en sus conflictos internos para los veteranos (Dani, Mateo, Joan, Gorka, Sergio, Tina, Puig, Cris y Alejo), y otra más breve para los secundarios. A continuación muestro parte de la ficha de personaje de Andrei (tiene hasta erratas, pero como es un documento de uso interno no me molesto mucho en pulirlas; lo que me importa es tenerlo como documento de consulta).
Una vez tuve terminada esta relación de deseos-obstáculos-conflictos, empecé a trabajar en la escaleta.
Soy escritora de mapa, aunque a veces peco de paisajista
¿Has oído alguna vez el término escritor de mapa y escritor de brújula? En caso de que tu respuesta sea negativa, te lo explicaré en pocas líneas: alguien que escribe a brújula, se pone a escribir a partir de una idea inicial y deja que la historia fluya, sin tener ni idea de cómo va a ir evolucionando. Por el contrario, alguien que escribe a mapa no empieza a escribir una novela si antes no tiene hecha una escaleta (una planificación previa de la trama).
Yo soy escritora de mapa, pero por lo general le doy libertad a mis personajes para que tomen decisiones y rumbos que no tenía previstos. Solo les impongo dos límites: que sus actos sean congruentes, y que se dirijan hacia el final que tengo previsto para el libro. Es decir, que pese a que tomen un rumbo no previsto, la historia siga encaminándose hacia el final que tenía planificado desde el principio.
Hace poco me enteré (gracias al podcast El escritor emprendedor) de que a esto, lo de escribir a mapa pero dejando cierto espacio a lo que pueda ir surgiendo durante el proceso de escritura, se lo denomina ser escritor paisajista.
Y como soy de mapa…, hago escaleta
Para mí, escribir una novela es un ejercicio de cabezonería y constancia. Por eso me ayuda muchísimo, como parte del proceso de escritura, tener hecha una escaleta previa antes de empezar a escribir, porque tengo la tranquilidad mental de saber de antemano qué me toca redactar (a grandes rasgos, porque siempre van surgiendo ideas y pequeñas subtramas a ir encajando) cada día.
En el caso de Rompiendo las reglas 2, fue así. Hice una escaleta muy sencilla: dividí primero la historia en arcos (en dos partes, como si fuera un partido de fútbol, y luego dos partes extra como si fuese la prórroga del mismo partido) especificando cuáles eran los puntos de clímax dramático de cada una, y luego dividí cada arco en capítulos. A continuación, resumí sin irme por las ramas qué iba a pasar en cada capítulo.
- Primera parte
- Capítulo 1: pasa esto, esto y esto.
- Capítulo 2: pasa esto, esto y esto.
- Capítulo 3: pasa esto, esto y esto.
- etc -> Finaliza con punto de inflexión
- Segunda parte
- Capítulo X: pasa esto, esto y esto.
- Capítulo Y: pasa esto, esto y esto.
- Capítulo Z: pasa esto, esto y esto.
- etc -> Finaliza con otro punto dramático
- Prórroga
- Primera parte: pasa esto, esto y esto.
- Segunda parte: pasa esto, esto y esto.
Escribí la novela en Pages usando una plantilla
Soy usuaria de Mac desde hace diez años, y he encontrado en Pages, el programa de ofimática nativo para procesar textos, un gran aliado. Y es que con este programa es extremadamente fácil y rápido exportar un texto como eBook en formato ePub (que es lo que pide Amazon actualmente) una vez le has dado un formato adecuado.
Hace unos años decidí hacerme una plantilla en Pages, de forma que cada vez que voy a empezar a escribir una novela, lo hago partiendo de esta plantilla. Así me aseguro de que todas mis obras tienen un mismo estilo de tipografías, que se genera automáticamente un índice de capítulos y demás detalles técnicos.
Esto, además, me facilita mucho las cosas, pues una vez he acabado de escribir, revisar y corregir la novela, solo tengo que exportar en ePub y sé que el trabajo de edición ya está hecho.
La lucha diaria por ser constante: la rutina de escritura
Empecé a escribir Rompiendo las reglas 2 en enero de 2024, poco después de que terminasen las vacaciones de Navidad.
Mi objetivo cuando empiezo a escribir una novela es mantener una rutina de escritura y terminar un capítulo al día (entre 8-10 páginas), dedicándole de media unas dos horas. Hay jornadas en las que puedo cumplir, otras en que no, así que me fijo el objetivo de terminar cuatro capítulos a la semana de media.
En el caso de Rompiendo las reglas 2, logré cumplir el objetivo, aunque me costó.
Lo cierto es que enero y febrero fueron meses complicados para mí: se me juntaron un montón de trámites burocráticos y proyectos anexos (entre ellos, montar la web y la tienda online), sumado a que mi hija enfermó varias veces (terribles virus de colegio). Hubo semanas en las que de veras llegué a pensar que no iba a ser capaz de mantener el ritmo y que no lograría terminar la novela en plazo para poder publicarla en primavera, pero a base de constancia y de mucha cabezonería, el 26 de marzo terminé de escribir el borrador.
Me llevó aproximadamente 11 semanas terminar de escribirlo, escribiendo de lunes a viernes una media de dos horas por sesión de escritura. Esa es mi rutina de escritura habitual.
Las lectoras cero (o lectoras beta)
También desde hace algunos años confío en varias lectoras cero, a las que agradezco profundamente su trabajo y el apoyo constante que me dan, porque en esto de la escritura hay muchos altibajos anímicos.
Cuento con cuatro lectoras cero que van leyendo la historia capítulo a capítulo. Su labor me ayuda muchísimo, porque me permite ir retocando pasajes, o cuando se me ocurren subtramas y, tras consultarlo con ellas, decido incluirlas o no en la historia.
Una vez he acabado el borrador, le mando el borrador terminado a otras dos lectoras cero, que se leen la historia del tirón sin haberse leído nada capítulo a capítulo. Su opinión me ayuda a tener una última visión global sobre si retocar o no algo en la trama.
Edición: registro y primera lectura
El proceso de edición me lleva, aproximadamente, unas tres semanas de trabajo.
Registro mis novelas a través de Safe Creative por dos motivos: el primero es que lo puedo hacer online (porque a día de hoy, para hacerlo en la oficina de mi provincia del Registro de la propiedad intelectual, tengo que desplazarme), y el segundo, que no tengo que imprimir el manuscrito, sino subirlo en formato digital. Así que puedo afirmar que tras varios años usando la plataforma, supongo que habrá opiniones sobre Safe Creative de todo tipo, pero yo estoy muy satisfecha.
Una vez registrada, empiezo a hacerle la primera lectura al manuscrito. Para ello, me paso el borrador maquetado como eBook al Kindle. Al leerlo en un soporte distinto (hasta ese momento solo he trabajado el texto en la pantalla del ordenador y sobre el procesador de textos), me resulta mucho más sencillo detectar erratas.
Me voy dejando comentarios y subrayados en el Kindle a medida que leo, y una vez he terminado de hacer la primera lectura del borrador, voy consultando todas las notas y subrayados que me he dejado para corregir el texto en el procesador, directamente en el archivo de la plantilla de Pages.
Este proceso me lleva, por lo general, una semana y media de trabajo, dedicándole entre dos y tres horas al día.
Maquetación en papel
Como comenté antes, al escribir la novela directamente sobre una plantilla, puedo generar el eBook en cuestión de segundos.
Por ello, una vez he corregido el texto en la plantilla tras la primera lectura, procedo a maquetar el libro de papel en tapa blanda.
Parto de una plantilla de Amazon que también tengo guardada, pues desde hace ya unos años publico mis libros en papel en tapa blanda con el mismo tamaño y estructura.
Dedico de media un día y medio a maquetar en papel en tapa blanda. En el caso de Rompiendo las reglas 2, tardé dos días, dedicándole 3 horas por sesión.
Segunda lectura sobre la maquetación de papel
Una vez he terminado la maqueta de papel, y ya con el archivo de la cubierta generado por la portadista, creo los borradores de la novela en Amazon, subo los archivos y me descargo la prueba en PDF.
Este es, posiblemente, el paso más tedioso de todos en el proceso de edición: realizo una segunda lectura del manuscrito, esta vez del PDF de la maquetación del libro de papel en tapa blanda, y desde el monitor del ordenador.
Me resulta tedioso porque a estas alturas ya estoy harta de mi propia historia (triste pero cierto, je, je) y estoy deseando acabar, pero este paso es crucial para asegurar que la calidad del libro es la mejor posible.
Llega un punto en que estás tan harta de tu propia historia que sientes la tentación de pasar por alto la segunda revisión del texto maquetado, pero no hay que ceder, porque esta revisión es crucial para que el libro salga lo mejor posible.
Esta segunda lectura me permite hacer cuantos ajustes sean necesarios en la maqueta del libro de papel (para evitar palabras huérfanas, etc.), y detectar también las últimas erratas, las cuales corrijo al mismo tiempo tanto en el archivo del eBook como en el archivo del libro de papel.
A este proceso le dedico de media también una semana de trabajo.
Además, como la saga Las reglas del juego está también disponible en tapa dura, maqueté el libro en tapa dura una vez tuve el texto limpio (dos días más de trabajo).
El equilibrio entre ser práctica y perfeccionista
Y llega el momento más complicado de todos: saber decir «hasta aquí».
Me explico: es muy tentador hacer mil revisiones de un texto, dedicarle horas y horas a seguir buscando erratas, elementos que retocar, etc., pero hay que saber ponerle punto y final, confiar en que el resultado sea el mejor posible y prepararte mentalmente para que vea la luz.
No es fácil, siempre está presente el miedo a haberte dejado algo atrás, a que haya errores. La inseguridad, el síndrome de la impostora, preguntarte si a los lectores les gustará la novela…, pero hay que saber parar.
Con la experiencia, he aprendido a decir «hasta aquí» y acallar las ganas de seguir editando centrándome en preparar el lanzamiento y promoción.
La preventa
El lanzamiento de Rompiendo las reglas 2 ha sido especial para mí, porque su preventa es la primera que he organizado desde mi tienda online. Detrás de la preventa hay más trabajo: hacer números, analizar costes, ver qué opciones ofrecer, etc.
Pero, sobre todo, hay ilusión…
Y por último, todo queda en tus manos
El momento en que lanzas un libro es mágico. Al menos a mí me da tanto pánico como felicidad. Es ese instante en que «la historia deja de ser tuya y pasa a ser de quien la lee».
Detrás de Rompiendo las reglas 2, como te he contado, hay mucho trabajo. Muchísimo. Hay esfuerzo, constancia, cabezonería, pero también ilusión.
Hay trabajo mío, pero también de otras personas a las que les vuelvo a dar las gracias.
Así que solo espero que disfrutes de esta nueva historia mientras yo me preparo para empezar a escribir la siguiente.
Ya están las fichas de personajes hechas, y la escaleta. Toca sentarse y empezar a escribir de media un capítulo al día durante las próximas 12 semanas.
La rueda sigue girando, y todo gracias a tu apoyo.
Gracias por leerme, nada de esto sería posible sin ti.
Buenas, Nisa.
Me ha encantado conocer este proceso. Curioso que empieces por la portada, aunque se ve que es algo que luego te inspira.
Te copio la idea para la ficha de personajes, jejeje.
Un abrazo.
Irene.
Muchas gracias, Irene 😀
La verdad es que lo de las fichas ayuda mucho a fijar en la cabeza todo lo relativo al personaje, y también a que sus reacciones conforme vas escribiendo sean más coherentes, porque al plasmar todo en la ficha, lo interiorizas más fácilmente.
Sí, puede ser un poco latoso hacer todas las fichas antes, como trabajo previo, pero vale la pena.
¡Un abrazo!